Contundentes fueron las pruebas presentadas por la Fiscalía de Licantén en contra de Tommy Ramón Morales Llanquimán para finalmente obtener una condena de 18 años de cárcel efectiva, luego de que se constatara que el imputado la madrugada del 05 de marzo del 2013 en el sector de la Puntilla II de Iloca, comuna de Licantén, atacó y golpeó con un elemento contundente a Sergio Armando Véliz Díaz quien producto de la heridas falleció en el patio de una casa, lugar en donde ambos compartían.
El fiscal jefe José Alcaíno presentó las pruebas ante el tribunal oral en lo penal de Curicó, cuyos magistrados validaron cada uno de los argumentos presentados por el Ministerio Público que acusó por el delito de robo con homicidio.
“La fiscalía trabajó con la Policía de Investigaciones y con Carabineros logrando reunir prueba indiciaria y también científica, en este caso sangre con ADN de la víctima en la ropa del imputado, quien una vez de dar muerte a la víctima huyo hasta el sur del país específicamente hasta la ciudad de Ancud. Ubicado el imputado se incautó ropa, dinero que portaba y especies adquiridas surgiendo el móvil del delito respecto de la sustracción del dinero. Se indagó el estado financiero del imputado y la víctima y con diversos testimonios de gente de la localidad se logró establecer que efectivamente el motivo por el cual dio muerte el imputado a la víctima fue el dinero que la victima guardaba ya que siempre mantenía grandes sumas de dinero en su poder y ello estando en conocimiento del imputado fue la causa por la cual le dio muerte con dicha finalidad. Le extrajo el dinero y huyó al sur del país”, afirmó el fiscal Alcaíno.
Se estima que Morales sustrajo a la víctima un monto cercano a los 300 millones de pesos, los cuales al momento de ser detenido, ya no portaba en su totalidad.
De esta forma se logró reunir la prueba suficiente para lograr la convicción del tribunal logran así el Ministerio Público una alta pena en contra de este imputado quién no podrá optar a ningún tipo de beneficio.