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Fiscalía abrió investigación para aclarar procedencia de un copón encontrado en el museo de Cardoen.

Feb 15, 2019
Padre José Abarza.

El pasado 12 de febrero, la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medioambiente y Patrimonio Cultural (Bidema) llegó hasta el Museo de Colchagua del empresario Carlos Cardoen Cornejo, con una orden de entrada, registro e incautación, en busca de un copón que habría sido robado en 2012 desde el Santuario del Carmen de Curicó.

Según explicó el fiscal a cargo del caso, Miguel Gajardo, el objeto fue reconocido por el rector del lugar, José Abarza, cuando visitó el museo. La información fue confirmada por La Tercera PM, donde el persecutor aseguró que el copón está bajo pericias para confirmar el hecho.

En este sentido, Gajardo aseguró que “estos hechos datan del año 2012 en que se recibió una denuncia por parte del rector del Santuario del Carmen de Curicó, dando cuenta de la sustracción de un copón, utilizados en las ceremonias litúrgicas de la Iglesia que tendría un gran valor patrimonial debido a su antigüedad y a los elementos de los que estaba compuesto”, dijo.

Con ello, agregó que “alrededor de un mes y medio atrás, concurre nuevamente el sacerdote a la Fiscalía de Curicó dando cuenta de que una visita que había hecho al Museo de Colchagua en Santa Cruz había podido ver un copón de similares características al que había sido sustraído el año 2012 y que tenía una seguridad bastante alta de que podía ser el suyo”.

Gajardo detalló que “habrían antecedentes bastante certeros de que podría ser la misma pieza sustraída el año 2012 porque las características que se indicaron de ella son plenamente coincidentes”.

Por su parte, Óscar Acuña Poblete, abogado que representa a la Fundación Cardoen, dueña del Museo de Colchagua, aseguró que están colaborando con toda la investigación.

“Cuando llega esta información de que podría haber sido sustraído se ofreció toda la información de la pieza en particular, como siempre se hace. Entregamos los datos de cómo ingreso y ya se conoce, por parte de las autoridades, que fue comprado a un anticuario durante el año 2013 y la Fundación va a colaborar”, dijo. En esta misma línea el hijo de Cardoen, Andrés Cardoen Aylwin, aseguró que se ajustarán a la ley. “No tenemos nada que ocultar. Las investigaciones se tienen que realizar y nosotros estamos tranquilos. (…) Desgraciadamente está ocurriendo esto que de verdad no lo entendemos. El Museo tiene más de 26 años, no entendemos este accionar, pero nos ajustamos a la ley”, concluyó.