En el lugar, personas desconocidas han estado depositando todo tipo de basura y escombros provocando una contaminación visual desfavorable para el turismo de la zona, debido a que un número importante de visitantes, aparte de disfrutar de los hermosos parajes de la costa curicana, también realizan caminatas y cabalgatas hasta el camposanto, para conocer parte de su historia.
El desagradable panorama también lo observan los residentes del balneario que visitan a sus seres queridos que se encuentran sepultados en el cementerio de Iloca.
Vale recordar además que el camino al cementerio es bordeado por un estero, cuyas aguas, una vez tratadas, son distribuidas para el consumo de la población.
De acuerdo a lo informado por lugareños, la basura es transportada en camionetas hasta el tramo subida al cementerio y las depositan en los sectores boscosos que están a orillas del camino.
Lo más preocupante, señaló uno de los denunciantes, es que entre los desperdicios se consideran vidrios y espejos quebrados, los que podrían provocar una combustión y generar un incendio forestal con impredecibles consecuencias, al proyectar el calor del sol con el pasto seco.