El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Curicó condenó a Víctor Manuel Cayupi Huaiqui a la pena de 7 años de presidio efectivo, en calidad de autor del delito frustrado de homicidio simple. Ilícito perpetrados en noviembre del año pasado, en el sector Potrero Grande de la comuna.
En fallo unánime (causa rol 144-2019), el tribunal –integrado por las magistradas Jimena Orellana Fuenzalida (presidenta), Patricia Möller Escobedo y Macarena Yáñez Cerda (redactora)– aplicó, además, a Cayupi Huaiqui las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure la condena.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
El tribunal dio por establecido, más allá de toda duda razonable, que alrededor de las 21.30 horas del 25 de noviembre de 2018, «en circunstancias que Luis David Llaulén Cona, se encontraba en el Fundo San Luis, ubicado en la ruta J-65 a la altura del km 29,5 Potrero Grande, comuna de Curicó, en una cama al interior de un conteiner destinado a dormitorio, Víctor Manuel Cayupi Huaiqui aprovechando que Llaulén Cona se encontraba durmiendo y bajo los efectos del alcohol en grado no determinado, utilizó un encendedor para prender fuego al colchón de la cama en que se encontraba la víctima, a raíz de lo cual el fuego se extendió por su estructura, alcanzando las llamas parte del cuerpo de ésta, siendo rescatado por otros trabajadores temporeros que se percataron del siniestro, para luego extinguir el fuego».
«(…) a consecuencia del fuego iniciado por Cayupi Huaiqui, el afectado Llaulén Cona resultó con quemadura de las vías respiratorias, quemaduras del 30% de superficie corporal, quemadura ABB, lo que dejará como secuelas, múltiples y extensas cicatrices rígidas e irregulares en extremidades superiores, extremidades inferiores y tronco que comprometen y rigidizan las articulaciones de los hombros, codo, muñecas, dedos y tobillos, provocando además la perdida de funcionalidad de ambas manos, lo que lo incapacita permanentemente para desarrollar funciones laborales. De no haber mediado tratamiento oportuno y eficaz, la víctima habría fallecido», agrega.
Fuente: Poder Judicial.